Hay colores que nos realzan, dan luz, y explotan nuestros atributos y otros que hacen el efecto contrario. Me pasa con este vestido gris que realmente me encanta por el vuelo de la falda y el corte en sí es favorecedor, pero el color no es el mejor que escogí. Entonces qué hacer con una prenda que te gusta pero no te va? Pues colocar accesorios que si van con nuestra tez.
Aquí un collar vino tinto que va muy bien con gris, de hecho es un color complementario y ya ocurre el cambio de tonalidad, al igual que el labial un poco oscuro.
Sandalias azules de animal print para romper un poco.
Un cinturón de colores también sería una opción muy chic para este tipo de dilemas.
Gracias por sus visitas.
Nos vemos en el próximo post.
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